Oliver Twist

Título original: Oliver Twist.
Dirección: Roman Polanski.

Países: Francia y Reino Unido.
Año: 2005.
Duración: 130 min.
Género: Drama.
Interpretación: Ben Kingsley (Fagin), Barney Clark (Oliver Twist), Jamie Foreman (Billy Sykes), Harry Eden (Artful Dodger), Leanne Rowe (Nancy), Lewis Chase (Charley Bates), Edward Hardwicke (Sr. Brownlow), Jeremy Swift (Sr. Bumble), Mark Strong (Toby Crackit), Ian McNeice (Sr. Limbkins), Jake Curran (Barney), Ophelia Lovibond (Bet), Chris Overton (Noah).
Guión: Ronald Harwood; basado en la novela de Charles Dickens.
Producción: Robert Benmussa, Alain Sarde y Roman Polanski.
Música: Rachel Portman.
Fotografía: Pawel Edelman.
Montaje: Hervé de Luze.
Diseño de producción: Allan Starski.
Vestuario: Anna Sheppard.

Sinopsis
Oliver Twist, así como el resto de los chicos del orfanato, se están muriendo de hambre, y deciden jugarse quién de ellos pedirá más comida. Oliver es el elegido. En la cena de esa noche, después de su ración normal, Oliver se dirige al director del orfanato y le pide más comida. Tachado de ser problemático por el Sr. Bumble, el bedel y por el director, Oliver es ofrecido como aprendiz a cualquiera que lo quiera contratar. Tras ser condenado a limpiar chimeneas, Oliver se convierte en aprendiz del enterrador Sowerberry. Pero Oliver se pelea con uno de los chicos del enterrador, y decide escapar e irse a Londres. En las afueras de la ciudad, cansado y hambriento, Oliver conoce a Artful Dodger, quien le ofrece un lugar donde hospedarse en Londres. Lleno de inocencia, Oliver se ve inmerso en el mundo del hampa de Londres e, ignorando sus tareas reales, se encuentra en medio de una banda de chicos carteristas dirigida por el malvado Fagin.


Crítica
Éste clásico de Charles Dickens ha sido llevado de nuevo a la pantalla grande, esta vez de la mano de un reputado director con cualidades contrastadas y con un buen currículum como Roman Polanski, con películas como "Repulsión", "La Semilla del Diablo" o la más reciente "El Pianista".

La historia es buena, de eso no hay duda, y es que la historia de éste pobre huérfano que trata de salir adelante como mejor puede simboliza cómo la bondad es algo escaso, y que la poca que hay es capaz de desaparecer por culpa de la "mala influencia"... En definitiva, una dura crítica a la sociedad (además de tener bastante contenido social).

Polanski lleva esta historia a la pantalla con acierto, ya que consigue poner la emoción, la carga social y los sentimientos precisos para que la película llegue al espectador y para dejar un buen sabor de boca al final.

La banda sonora de Rachel Porter no se puede dejar de mencionar: es muy buena. En es aspecto técnico la película es prácticamente impecable, con una buena fotografía, dirección artística, vestuario, maquillaje... Aunque precisamente el maquillaje también juega un poco en contra de la peli, ya que impide un poco el lucimiento de la figura más representativa del reparto: Ben Kingsley, que a pesar de eso es lo más destacable en ese aspecto, ya que el resto de actores no hacen nada fuera de lo normal.

Una buena película, que además entretiene mucho, y aunque no es una película para niños, supongo que tampoco estaría mal para ellos (al menos para los no muy pequeños).


Puntuación: 7