Thai-Dragon

Título original: Tom yum goong (The Protector).
Dirección: Prachya Pinkaew.
País: Tailandia.
Año: 2005.
Duración: 109 min.
Género: Acción.
Interpretación: Tony Jaa (Kham), Mum Jokmok (Mark), Bongkuch Kongmalai (Pla), Amonphan Gongtragan (Goong), Jing Xing (Madame Rose), Johnny Nguyen (Johnny), Nathan Jones (TK), David Asavanond (Oficial Rick), Jon Foo (Luchador), Lateef Crowder (Luchador).
Guión: Napalee Piyaros Thongdee, Joe Wannapin y Kongdej Jaturanrasamee; basado en un argumento de Prachya Pinkaew.
Producción: Prachya Pinkaew y Sukanya Wongsathapat.
Música: Zomkiat Ariyachaipanich y Sasis Millindavanij.
Fotografía: Nathawut Kittikun.
Montaje: Marut Seelacharoen.
Dirección artística: Ukkadej Kaewkot.
Vestuario: Ekkaphume Nganchamung.



Sinopsis
Kham es un joven que vive apaciblemente en su aldea de la Tailandia rural. Pero esta tranquila vida dará un vuelco cuando una banda mafiosa con base en Australia roba sus elefantes trasladándolos a Sidney. Los dos elefantes son más que unos simples animales para Kham y su padre; son dos miembros más de la familia que han sido preparados durante años para regalárselos como signo de devoción al rey de Tailandia. La única posibilidad de recuperar a los animales será adentrarse en una tierra desconocida y luchar contra la banda mafiosa.


Crítica
Cuando empieza la película entiendes que la historia es una mera excusa para dar rienda suelta a Tony Jaa y sus habilidades (aunque era algo que se puede imaginar antes de ver la peli). A los que nos gustan las pelis de acción no pedimos que sea una obra maestra ni que tenga una gran historia para poder pasar un rato entretenido, simplemente que la historia tenga un mínimo de credibilidad, pero esta película no llega ni a eso.

Vaya guión casposo, vaya actores tristes... El desarrollo de la película es un completo sinsentido, y a medida que avanza se va haciendo peor, llegando a un final que es una fantasmada que ni te cuento y unas palabras finales que dan vergüenza ajena. Por si fuera poco, se nota mucho la falta de medios, y eso que el presupuesto de esta peli es la leche para ser una película tailandesa... Así que si esto es lo mejor que nos pueden ofrecer mejor que no nos ofrezcan nada.

Tony Jaa es lo mejor de la película sin duda alguna. Tiene una gran habilidad para las artes marciales, y es todo un mérito que no use dobles. Además es un digno intérprete, y mira que es difícil demostrar algo de sentimientos con una historia tan cutre... Las escenas de acción en las que interviene Tony Jaa (se echan en falta más, por cierto) son lo que hace que algunos ratos de la película merezcan la pena, aunque es una pena que la película no tenga un mejor director.

Mención especial a una larga escena de acción rodada en un sólo plano, sin saltos de montaje... Una mala película que no está a la altura de su protagonista. Tony, te aconsejo que emigres...



Puntuación: 4

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