Tú, Yo y Todos los Demás

Título original: Me and You and Everyone We Know.
Dirección y guión: Miranda July.

País: USA.
Año: 2005.
Duración: 91 min.
Género: Comedia dramática.
Interpretación: John Hawkes (Richard Swersey), Miranda July (Christine), Miles Thompson (Peter), Brandon Ratcliff (Robby), Carlie Westerman (Sylvie), Natasha Slayton (Heather), Najarra Townsend (Rebecca), Hector Elias (Michael), Tracy Wright (Nancy), Jo Nelle Kennedy (Pam).
Producción: Gina Kwon.
Música: Mike Andrews.
Fotografía: Chuy Chávez.
Montaje: Andrew Dickler y Charles Ireland.
Diseño de producción: Aran Mann.
Dirección artística: John Wyatt.
Vestuario: Christie Wittenborn.


Sinopsis
Christine Jesperson es una artista solitaria que trabaja como conductora de taxis para mayores. Ella utiliza sus fantasías artísticas para sentirse más cerca de sus objetos de deseo. Richard Swersey, dependiente de zapatería recién separado y padre de dos niños, parece estar preparado para las cosas sorprendentes que van a pasarle, pero cuando conoce a Christine, siente pánico. La vida no es tan complicada para los hijos de Richard. Robby, de siete años, mantiene un peligroso romance por Internet, mientras que Peter, de catorce años, se convierte en conejillo de Indias de unas chicas vecinas suyas, que están practicando para sus futuros noviazgos y bodas. En este universo, lo prosaico es trascendente y las personas comunes y corrientes se convierten en personajes luminosos que hablan de sus pensamientos más íntimos, siguen secretos impulsos y experimentan momentos de sincera humanidad que a veces se acercan a lo surrealista. Buscan compañía por caminos atormentados y finalmente encuentran alivio en los breves momentos en que consiguen conectar con alguien en la tierra.


Crítica
La opera prima de Miranda July ha resultado una muy grata sorpresa, cosa a la que el cine estadounidense no nos tiene muy acostumbrado, pero de vez en cuando nos llegan pequeñas joyas como esta, sobre todo del cine independiente.

Es una película coral que nos habla, como dice el cartel, de los misterios del sexo y los encantos del corazón. El primer tema está principalmente enfocado desde la perspectiva de los niños-adolescentes, etapa en la que toda persona se siente atraída ello. Y el segundo tema es de más importancia en la película, ya que se trata en cada una de las historias (o casi). Las historias son independientes, pero todas están entrelazadas y guardan relaciones entre sí.

El guión de Miranda July es magnífico, resulta muy humano, está muy bien escrito y abarca mucho. Todo ello secundado por una dirección, también por parte de July, que adapta cada línea del guión de manera perfecta, y con un estilo realmente cautivador, y que hace la película muy amena, simpática y agradable de ver. También nos arranca algunas risas, sobre todo con el personaje del niño de siente años, que es un artista.

El desconocido reparto (en el que está también Miranda July) está bien sin ser nada del otro mundo. Un genial ejercicio de originalidad que no os deberíais perder si aún no habéis disfrutado de la película.



Puntuación: 8

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