American Dreamz: Salto a la Fama

Título original: American Dreamz.
Dirección y guión: Paul Weitz.
País: USA.
Año: 2006.
Duración: 107 min.
Género: Comedia.
Interpretación: Hugh Grant (Martin Tweed), Dennis Quaid (Presidente Joe Staton), Mandy Moore (Sally Kendoo), Marcia Gay Harden (Primera Dama), Chris Klein (William Williams), Jennifer Coolidge (Martha Kendoo), Willem Dafoe (Jefe de gabinete), Judy Greer (Accordo), John Cho (Ittles), Seth Meyers (Chet Krogl), Shohreh Aghdashloo (Concursante), Sam Golzari (Omer).
Producción: Paul Weitz, Rodney Liber y Andrew Miano.
Música: Stephen Trask.
Fotografía: Robert Elswit.
Montaje: Myron Kerstein.
Diseño de producción: William Arnold.
Vestuario: Molly Maginnis.


Sinopsis
En el mundo actual, da la impresión de que absolutamente todo el mundo quiere ser famoso. Gracias al fenómeno global de los programas "de realismo", es posible que cualquiera lo sea. Un ejemplo perfecto es uno de los programas de mayor audiencia en Estados Unidos, el concurso "American dreamz", cuyo anfitrión Martin Tweed (Hugh Grant) ha remodelado el concepto de “cazatalentos”: enfrenta a concursantes entusiastas (el talento es lo de menos) en una emisión semanal ante unos jueces muy escogidos. Decidido a ganarse a los inconstantes telespectadores y seguir a la cabeza de los índices de audiencia de la cadena, Martin Tweed ha hecho de todo para mantener la popularidad del programa, pero esta temporada se superará a sí mismo. Entre la encantadora cosecha de nuevos finalistas “soñadores” está Sally (Mandy Moore), la típica belleza sureña toda dulzura delante de las cámaras, pero que no tiene nada de amable en la vida real, y Omer (Sam Golzari), un incompetente terrorista en potencia al que le encantan las melodías de Broadway. También está el novio de Sally, William Williams (Chris Klein), un joven veterano de guerra sin muchas luces, y toda una colección de fans, personal de la cadena, expertos culturales y estrategas. Pero por si fuera poco, Martin Tweed se las ha arreglado para que el mismo presidente de Estados Unidos (Dennis Quaid) actúe de juez en el último programa de la temporada. El escenario está preparado para un programa explosivo que la nación nunca olvidará. Ha llegado el futuro, con la fama a disposición de cualquiera que esté dispuesto a hacer lo que sea para conseguirla.


Crítica
Esta película es principalmente una sátira de los reality shows, la fama y la política estadounidense muy directa, que está constantemente lanzando dardos hacia estos elementos, sobre todo en la primera mitad de la película.

Como comedia funciona, ya que puede resultar ser tronchante (especialmente para las personas críticas con los EE.UU.), gracias a los dardos que lanza contra George Bush, la fama o el "sueño americano" y gracias también a algunos gags más convencionales pero igualmente efectivos.

El guión es muy bueno, ya que la sátira es inteligente y divertida y no se basa en ridiculizar (al menos no más de lo debido) los temas criticados y se crean situaciones muy curiosas. Paul Weitz vuelve ha vuelto a hacer una muy buena película, y es que desde "Un Niño Grande" todo lo que pasa por sus manos lo convierte un film interesante, divertido y de calidad.

Hugh Grant está muy bien (y no tartamudea) al igual que Dennis Quaid, ambos protagonistas de sus dos anteriores films (por separado).

En definitiva, si quieres reírte con una comedia inteligente y de calidad, ésta es tu peli.


Puntuación: 7

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